Es un gesto que no supone nada para ti y que lo es todo para muchos: por tantos que necesitan tanto
Cada vez falta menos para que termine el plazo de declaración de la Renta. La Iglesia católica se juega mucho. Son ya muchos años de la campaña «X Tantos» para animar a los contribuyentes a marcar la X de la solidaridad. Y cada vez son más las personas que apuestan por dar esta ayuda.
La Iglesia da una serie de razones interesantes para colaborar, pero me quedo con esta: Marcar la ‘X’ de la Iglesia en tu declaración es un gesto que no supone nada para ti y que lo es todo para muchos: por tantos que necesitan tanto. No tiene coste alguno en tu declaración. Ni pagarás más, ni te devolverán menos. Y estarás ayudando a más de cuatro millones de personas. Así de sencillo.
Cuando uno se quita la careta de los prejuicios se da cuenta de la inmensa labor social que desarrolla la Iglesia católica en nuestro país. Los datos son incontestables.
Según recoge la última Memoria, la Iglesia atiende a personas pobres o que viven en soledad a través de las 11.396 parroquias que hay en España. También está al lado de los presos: 170 capellanes y 2.526 voluntarios atienden a una población reclusa de 60.000 personas, en tareas sociales de previsión y reinserción, espirituales y jurídicas. Los enfermos son ayudados en 2.730 parroquias, con 841 voluntarios en hospitales, acompañando a 147.000 personas. Asimismo, son 18.000 los voluntarios que acompañan en las casas a 63.000 enfermos. Los ancianos y discapacitados cuentan con 792 casas donde se alojan 76.000 personas. Casi nada.
Así podríamos seguir con la atención a los parados (95.559 beneficiarios), drogodependientes (23.403), menores sin tutela familiar (47.286), mujeres víctimas de la violencia (22.770), inmigrantes (140.897), etc. Otra cifra llamativa es la atención a los más pobres que comentaba al inicio: a través de 6.323 centros se atiende a 2.787.669 beneficiarios. Ahí lo dejo. Bueno, añado un dato que me ayuda: estas personas son atendidas siempre independientemente de sus creencias. No hace falta un «carnet» de católico.
Por todo esto creo que marcar la «X» de la Iglesia en la declaración de la Renta es un acto de justicia social y solidaridad con los más necesitados. Además, soy un convencido de que siempre hay más alegría en dar que en recibir.
La campaña pone cara y ojos a los beneficiarios de estas ayudas de la Iglesia y nos habla de personas como Ramón, que dejaron la droga y la delincuencia. Por personas como Halyna, que llegaron a nuestro país huyendo de la guerra y encontraron un hogar y trabajo. Por personas como Ángela, para que su discapacidad no les impida disfrutar de una vida plena e independiente. Por personas como Ruth, para que logren romper con una vida marcada por la violencia. Por personas como Manuel, para que puedan seguir comiendo tres veces al día. Por personas como tú.