El 5 de octubre tuvo lugar en nuestra parroquia la primera de las sesiones de formación dirigida por Fray Alfonso García Araya. En ella, Fray Alonso nos habló sobre la importancia de la Palabra de Dios, que es uno de los lugares privilegiados para el encuentro con Dios.
Una lectura asidua de las Sagradas Escrituras es una gran forma de conocimiento de Cristo.
Los escritos originales que confoorman la Biblia están escritos en hebreo y arameo (el Antiguo Testamento) y en griego (el Nuevo Testamento). Es en las distintas traducciones de esos esccritos, y en las anotaciones que se incluyen, las diferencias entre unas biblias y otras.
La interpretación de la Biblia es crucial. Por ello, la Iglesia Católica no se toma a la ligera esa labor, y dedica el esfuerzo de muchos exégetas al estudio de la Biblia. Algunos de los consejos que nos da Fray Alfonso son:
- Acudir a gente versada.
- Recurrir a comentarios buenos.
- Apoyarse en libros extra bíblicos para entender mejor el mensaje.
- Formar grupos bíblicos parroquiales.
- Finalmente y para profundizar en el tema, dejamos alguna bibliografía que Fray Alonso nos dió:
“Dei Verbum” (Documentos del Concilio Vaticano II).
“Verbum Domini”. Benedicto XVI.
En la segunda sesión de formación, recibimos a D. Carlos González que nos habló de «La caridad en la Iglesia«. Las ideas fundamentales de la ponencia fueron:
– La caridad en la Iglesia es una acción libre y responsable que nos identifica con Dios.
– El amor al prójimo es la segundo mandamiento. No se puede amar a Dios si no se ama la prójimo. El amor al prójimo es indisoluble del amor a Dios.
– La Iglesia se sustenta en 4 pilares:
– Palabra de Dios
– Eucaristía
– Oración
– Comunión Fraterna
estos cuatro pilares dan equilibrio a la Iglesia.
– El amor al prójimo, la caridad, también necesita una organización. En los primeros tiempos de la Iglesia, los apóstoles, desbordados por anunciar la Palabra, crearon el diaconado, precisamente con la idea de atender a las viudas.
La caridad no debe ser un signo distintivo de los cristianos, sino un signo de identidad. Se trata de identificarnos con Cristo. El perfil caritativo de la Iglesia debe ser:
– Independiente de ideologías y políticas.
– No puede ser un medio de proselitismo. El amor es gratuito…lo que no significa tampoco dejar de lado a Dios.
En la tercera sesión de formación, nos acompañó D. Antonio vergara González. En esta ocasion, D. Antonio nos habló sobre los sacramentos. Veamos los aspectos más importantes de esta ponencia:
– En los sacramentos podemos encontrarnos realmente con Dios
– Los sacramentos son signos visibles de una gracia invisible.
– Son signos sensibles de la gracia instituidos por Cristo
Signos sensibles -> es una cosa conocida que manifiesta otra menos conocida.
Signo eficaz -> no sólo significa sino que produce la gracia.
Cristo ha querido acomodarse a su forma de ser, dándonos los dones divinos por medio de las realidades materiales que usamos.
Si los sacramentos se reciben con las disposicione requeridas producen:
-Gracia santificante (nos ayuda a vivir santamente)
-Gracia sacramental (es un derecho de los fieles)
-Carácter (Bautismo, Orden y Confirmación) -> cambian a la persona, y por eso son irrepetibles
El sacramento consta de 3 partes.
– Materia
– Forma
– Ministro
– Como propósitos de esta sesión, D. Antonio nos propuso dos objetivos:
-Agradecer a Dios los sacramentos
-Recibir con frecuencia la Eucaristía y la Penitencia
– Para profundizar en este tema, D. Antonio nos recomendó acudir al COMPENDIO DEL CATECISMO, puntos 1113 al 1131.
Finalmente, el día 9 de noviembre, en la cuarta sesión de formación, recibimos a D. José Antonio Plata Brito, actual párroco de la Milagrosa en Sevilla. El título de esta sesión fue «La parroquia, como casa y escuela de comunión.
Aquí vimos como la Iglesia es la «común-unión»: la unidad de personas diferentes.
- Parroquia y Comunión están íntimamente ligadas. Cristo quiere que nos salvemos, pero no de forma individual, sino unidos, como Pueblo… Ese Pueblo, es la Iglesia.
- La parroquia es un lugar de acogida, dónde nos reunimos, y donde hay un ambiente fraterno. Además, es Escuela, porque es el primer lugar de aprendizaje de la fé.
- Dice el Papa Francisco: «Antes de programar iniciativas concretas, hace falta promover una espiritualidad de la comunión, proponiéndola como principio educativo en todos todos los lugares donde se forma el hombre y el cristiano.»
- Respecto a Iglesia, la comunión es el eje transversal.
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