Pastoral de la salud

La pastoral de la salud en la parroquia es el cauce y la expresión de la caridad pastoral de la comunidad hacia los enfermos. El servicio evangelizador de los agentes de esta pastoral no es sino el instrumento concreto que impulsa, coordina y lleva a cabo la fraternidad y la solidaridad de toda la comunidad parroquial hacia los enfermos. Los enfermos, miembros de la parroquia tienen múltiples necesidades y éstas piden que se les atienda desde diversos carismas o modalidades de servicio.

El equipo da estabilidad y continuidad a la pastoral parroquial. El equipo lo forman personas: con carisma hacia los enfermos y con alguna experiencia en su trato, con viva inquietud evangélica y con sentido de iglesia.

Y ¿cuál es su tarea?

a) Conocer a los enfermos. Antes que nada, el equipo conoce los enfermos que hay dentro de la parroquia. Conoce a aquellos enfermos que están en sus lugares de manera permanente: enfermos crónicos, minusválidos físicos, sensoriales, psíquicos; disminuidos por accidente, paralíticos cerebrales, etc. Y también ese sector cada vez mayor de ancianos enfermos, deteriorados, disminuidos que viven encerrados en sus casas.

b) Acercarse a los enfermos. El primer gesto de la comunidad parroquial ha de ser acercarse a estos enfermos y, de manera particular, a los más olvidados y necesitados. Los agentes de pastoral de la salud son los que aseguran esta cercanía al enfermo. Se trata de acercar la comunidad parroquial al enfermo y acercar el enfermo creyente a la comunidad parroquial. Por otra parte, hay que acercar a la comunidad parroquial hacia el enfermo creyente, recordarlos en la eucaristía de la comunidad, propiciar que el sacerdote les lleve la comunión frecuentemente y los haga partícipes además del sacramento de la confesión y de la unción, ayudarles a estar presentes en la parroquia en días señalados (Pascua, Pentecostés, Día del Enfermo).

c) Servir a los enfermos. La pastoral de la salud ha de estar muy atenta a cualquier necesidad de los enfermos sean crónicos, sean temporales, estén en un centro sanitario o residan en su casa. A veces, junto a los problemas que trae consigo la enfermedad, se añaden otros problemas.

A veces es la familia del enfermo la que necesita una presencia y una ayuda, más que el enfermo mismo. Muchas veces el acercamiento de los visitadores de enfermos ha de ser a la familia.

 

 

 

logo original recortado completo